El cliente tiene el deber de mantener en estricta confidencialidad su clave secreta. Salvo que fuere por causas imputables a Banco Ripley y/o CAR S.A., estas últimas no serán responsable en caso que dicha clave secreta sea utilizada por personas no autorizadas distintas del cliente o del mal uso de la clave secreta, siendo los perjuicios producidos por dicho evento de responsabilidad del cliente.